En los años 80 el anime y los dibujos animados estaban plagados de testosterona, dedicados a llevar a los niños a soñar con los personajes. Por otra parte el campo de series animadas dedicadas a las niñas aunque poco extenso, estaba plagado de un sentido cursi a pleno, y era algo fácil de comprender porque trataban de tragedias, romance, y todo aquello que se esperaba de personajes femeninos que se estereotipaba en esa época.
Pero para América Latina esto cambió un poco cuando a todo el trajín de ser una linda y educada niña, le cambiamos el hecho de que ya no era necesario ser solo la protagonista, si no también podías ser la heroína.
El amor quedó de lado pero siguió existiendo el concepto, la ternura fue matizada con un poco de comedia, y de pronto niñas y niños de esa generación se enfrascaron en la búsqueda de la Flor de Siete de los Colores.
Pasando de Candy a Angel
Candy Candy fue un gran éxito de la programación en las primeras horas de la noche en Japón, pero a principio de 1979 esta serie que cautivó a todas las niñas del país término dejando el horario libre para una nueva serie del mismo género.
La diferencia era que esta vez tomaría el mando en el argumento y guion el escritor Shiro Jumbo de tal manera que a solo un mes de la culminación de Candy la preciosa Lunlun (el nombre original de Ángel) tomaba las pantallas de televisión con un nuevo programa llamado Hana no Ko Run Run, o como se lo conoció en español: Ángel la niña de las flores.
La gran diferencia fue que el guion se tiñó de fantasía y magia, lo cual le dio un impulso más grande a la serie haciendo de LunLun un personaje diferente. La animación estuvo a cargo del mismo equipo que se encargó de realizar Candy, de tal manera que era un poco difícil diferenciar el estilo y Ángel terminó pareciéndose mucho a la protagonista de la anterior animación.
En busca de una flor con los colores del arcoíris
La serie cuenta la historia de la dulce Ángel (Lunlun), quien junto a sus abuelos por el sur de Francia, en el cumpleaños 17 de la muchacha, llegan del planeta de las Flores dos mensajeros, estos son Katty una dulce gatita y Rope un perro, quienes tienen como misión la búsqueda de la "Flor de Siete Colores", revelando que Ángel es descendiente de las hadas de las flores.
La Flor de los Siete Colores es la herencia de la familia real de su planeta, y es necesaria por el Príncipe para convertirse en el nuevo Rey. Con este fin los tres viajan alrededor de Europa buscando la flor.
Para ayudarle en la misión el perro y la gata, otorgan a Ángel la "llave de las flores", un talismán que le permite utilizar el poder de las flores, obteniendo ciertas habilidades además de la indumentaria teniendo solamente cerca cualquier tipo de flor de la cual toma prestado el poder.
En su travesía choca frecuentemente con Malina, la antagonista de la serie, quien también se encuentra en busca de la Flor de los Siete Colores para tener el derecho de convertirse en la reina del mundo de las hadas. Junto a Malinaestá Boris, un hombre-mapache cuya cola continuamente lo delata a pesar de vestir como humano común.
En cada episodio, ella ayuda a solucionar los problemas de las personas que se cruzan en su camino, mientras que un joven misterioso, llamado Celli, aparece frecuentemente donde se encuentra Ángel brindándole su ayuda.
Al fin de cada episodio, Celli otorga a las personas que Ángel había ayudado las semillas de flor, una especie distinta en cada ocasión, para que nunca se olviden de ella.
El impacto
Después de su éxito en Japón, Ángel fue licenciada en varios países de Europa, donde fue un éxito, ya que la travesía ficticia del personaje hizo fácilmente identificarse con ella, después de su éxito en el viejo continente llego a América Latina a principios de los 80, donde también fue recibida con gran fanaticada.
El recorrido de 50 episodios que realizó buscando una flor, no solo fue seguido por el público femenino, sino también a la espera de una conclusión muchos niños siguieron la serie y encontraron que la idea de una niña con los poderes de las flores no era para nada aburrido.
Ángel es una de las cosas bellas que encontramos en el recorrido y la historia del anime en Latinoamérica. Seguro esta serie sea un lazo que une esa generación con la nueva y la siguiente, ya que si bien la niñez y juventud que hoy sigue el género shōjo, puede fácilmente compartir las nuevas historias con aquella niña de los 80, que para su imaginación y sueños era la niña de las flores, y quien dice puede que ahora la misma niña se haya convertido en tu mamá.
¿Viste la serie? ¿Qué te pareció? ¿Quién recuerda el antro y al perro dormido con esa burbuja de mocos?
LIKE Y COMPARTE SI TE GUSTÓ!!!
LIKE Y COMPARTE SI TE GUSTÓ!!!
